¿Nunca has hecho un corto, pero estás pensando en participar en Villanueva Showing Festival? ¡Pues atento!

Todo proyecto audiovisual que se quiera llevar a cabo debe tener una minuciosa planificación para así alcanzar el éxito. Ya que no basta con tener un gran concepto, debemos contar con las herramientas necesarias para hacerlo. Hay muchas cosas que pueden salir mal en la producción de un corto, es por eso por lo que aquí te dejamos 10 tips para hacerte más fácil el trabajo.

  1. Escribir un guion sencillo:

Todo proyecto audiovisual debe comenzar por escribir un guion, para así poder tener una referencia y saber hacia dónde dirigir nuestras ideas. Para escribir un guion, es más fácil si el hecho ya ha sucedido. Elige una anécdota y un tema, relata en orden los hechos, describe el escenario, añade diálogos y acciones a los personajes… ¡y no te olvides de pensar en la música y el sonido!

Todo el material es bueno para poner en marcha tu idea.

  1. Actores:

Todo cortometraje necesita actores. Cuanta mayor diversidad entre actores, más atractivo será tu cortometraje. Busca actores de todas las edades, de esta manera la experiencia será mucho más enriquecedora. Aunque la historia limite un marco de edad, será bueno que aparezcan actores de otras edades, así podrás cubrir diferentes puntos de vista, y el mundo de tu corto será más realista.

¿Necesitas hacer un casting? ¡Hay muchas plataformas en internet en las que puedes buscar actores!

  1. Tener un buen equipo:

Es necesario un buen equipo: una buena cámara, un trípode, un micrófono y un buen editor de vídeos. Pero sin ninguna duda es más importante el equipo humano que conforma la creación del corto.

La sintonía entre las partes técnica y humana ayudará a que el equipo tenga una idea clara de qué es lo que deseas para hacer tu cortometraje.

  1. Colores y moodboard

Cada pequeño detalle que aparece en la pantalla comunica algo al espectador. Por eso debemos parar a pensar los colores que aparecerán en el video, así como la ropa que llevará cada actor en los distintos momentos o las luces que se usarán. Pero ojo, ¡los planos con los que cuentes tu historia también son importantes!

  1. Visita y planifica

Es importante que cada vez que emprendamos un proyecto audiovisual, conozcamos perfectamente las localizaciones. Debemos visitar varias veces el lugar donde se grabará, ya que de este modo podemos ver los efectos de la luz del día en cada rincón y nos familiarizamos con el entorno. Esto nos ayudará a crear una mejor atmósfera a la hora de la grabación.

  1. Presupuesto:

Busca, crea y organiza un presupuesto. No es buena idea destinar gran parte de los recursos a una sola área de producción, y descuidar otros apartados. Debemos buscar el equilibrio a la hora de repartir el presupuesto para que todas las áreas queden cubiertas.

  1.     Ensaya, ensaya y vuelve a ensayar

Cuanto más tiempo dediques a practicar, mejor será el resultado. Ensayar con los actores es una inversión de tiempo, ya que a la hora de grabar será más ágil y preciso.

Mientras se ensaya se puede grabar, puesto que de este modo descubrirás los fallos que existen, los actores cogerán soltura ante la cámara y puede que en algún momento exista algún fragmento de alguna toma que sirva.

  1. Organiza los planos:

Organiza los planos de las escenas según estás aparecen en el guion. De este modo, ahorrarás tiempo y trabajo a la hora de grabar y de montar tu corto, evitando muchos errores. Además, también te ayudará a tener una idea clara sobre cuánto tiempo dura cada escena.

  1. El sonido:

El sonido es un aspecto fundamental, pues ayuda a que el espectador pueda disfrutar más de la historia. No solo el diálogo es muy importante a la hora de contar la historia, también los sonidos de fondo y del ambiente ayudarán a dar contexto a tu escena.

  1. Sentido crítico

Finalmente, cuando hay que montar el proyecto audiovisual se pone a prueba el sentido crítico. La decisión de las escenas que hay que poner y de las que hay que desprenderse es quizás la más complicada de todas. Por eso que hay que tener en cuenta que hay secuencias que pueden sobrar porque no aportan ninguna información al proyecto final.

¿No tienes muy claro si una escena te funciona o no? Prueba a enseñársela a alguien que no conozca tu proyecto y observa cómo reaccionan. ¡Puede ser muy útil!

María Saavedra